31 de diciembre de 2008

La última noche del año

Hoy hemos tenido una noche muy especial. Durante toda la tarde ha habido un gran revuelo en casa. Hemos cocinado, preparado dulces, e incluso hemos decorado el salón: papá y yo hemos estado colgando serpentinas de colores de todos los sitios.

No ha sido por casualidad; era el último día del año y había que celebrarlo. En cuanto terminamos la cena empezó la fiesta: bailé con papá y mamá (he aprendido incluso a darme una vuelta mientras bailo), nos pusimos las caretas que podeis ver en la foto. A las 12 nos tomamos las uvas (bueno, pasas porque aquí no encontramos uvas), tomamos champan (sin alcohol) y luego salimos al jardín a ver los fuegos artificiales (yo digo "celades" porque para mí eso es muy largo y difícil). Eran muy bonitos y hacían mucho ruido. Además fue muy curioso eso de estar tan tarde en el jardín. ¡tan tarde no me había ido a dormir nunca en la vida! Imaginaos que era la una de la mañana cuando me fui a la cama. Está bien, ¿no?.

¡Feliz Año Nuevo para todos!

26 de diciembre de 2008

El niño Jesús también vino a casa de los abuelos

Hoy hemos ido a casa de los abuelos húngaros para felicitarlos la Navidad, y no os podeis ni imaginar que pasó. Primero, que ellos también tenían un árbol muy bonito y grande en el salón. Pero lo mejor de todo es que debajo había dos regalos para nosotros que había dejado el niño Jesús. ¿Sabeis lo que había dentro?

En uno un cochecito de bebé de juguete muy bonito y todo rosa, que venía también con un canasto (igualito que el de Raúl, sólo que en rosa) y una bolsa para llevar las cosas. Así ya por fín podemos ir a dar grandes paseos juntos, y cada uno lleva a su bebé (Mamá a Raúl, y Laura a Linda). En el otro paquete había una ropita muy bonita azul con un perrito dibujado. ¿A que no os podeis ni imaginar para quien era ese? :)

24 de diciembre de 2008

¡Ha venido el niño Jesús!

Cuando hoy hemos terminado de bañar a Raúl y hemos ido al salón nos hemos encontrado con que había un montón de regalos debajo del árbol de navidad. Seguro que el niño Jesús ha venido mientras estábamos todos en la habitación de Raúl y ha puesto ahí los regalos.

En seguida Laura se ha puesto a repartir a cada uno sus regalos y a abrir los suyos. Por suerte, como el niño Jesús sabe que todavía no sabe leer, en vez de poner los nombres en los paquetes ha puesto fotos.

A Laura le han traido muchos regalitos: una plancha con tabla y todo, ropa, braguitas, todos los muñecos de Pocoyo, una muñeca casi tan grande como Raúl, unos guantes, unos playmobil, una pizarra y una cocina con fregadero y frigorifico y todo. En la foto la podeis ver abriendo esta última, que era lo único que le había pedido y que llevaba un montón de tiempo esperando.

A Raúl también le ha dejado algunas cosas: un muñeco que se le enciende la cabeza cuando le abrazas, una casita que tiene música y proyecta dibujos en el techo y un tigre pequeñito de peluche. En la foto le podéis ver cuando Laura se lo lleva.

23 de diciembre de 2008

Felices Fiestas

Os deseamos unas muy felices fiestas

22 de diciembre de 2008

De paseo por Budapest

Hoy hemos ido de paseo por Budapest. Lo primero hemos ido hasta la Plaza de los Héroes, para que Judith pudiera patinar en la pista de hielo que hay allí. Yo la he estado viendo un rato desde fuera y me ha gustado mucho cómo patina. Mientras, los abuelitos, papá y yo hemos estado paseando por los alrededores. En el vídeo de abajo me podeis ver como iba de la mano de los dos abuelos.



Luego hemos estado en un mercadillo de navidad viendo un montón de cosas y he probado un pan con forma de rizo y un chocolate caliente que se compró Judith. Del vino caliente de los abuelos no me han dado, pero mejor, porque olía muy mal.

21 de diciembre de 2008

Con la tía Judith

Aprovechando que está aquí la tía Judith (o Kruska o Didi como a ella le gusta que le llamen) me hecho algunas fotos con ella. Aquí os dejo una en la que mejor salimos los dos.

Aunque estos días está más pendiente de Laura, también me hace bastante caso a mí, e incluso me ha cambiado algún que otro pañal. Estoy deseando crecer un poquito más para poder jugar con ella y con Laura.

19 de diciembre de 2008

¡Cuántos abuelos!

Hoy han venido los abuelitos Gyuri y Maria para saludar a los abuelitos Emilio y Blanca. Después de estar un rato con unos y con otros, y sin saber muy bien que hacer, lo único que se me ha ocurrido es exclamar: "¡Cuántos abuelos!".

Aquí me podeís ver con las abuelitas:


Y aquí con los abuelitos:

18 de diciembre de 2008

La família española

Hoy han llegado los abuelitos Emilio y Blanca y la tía Judith, que han venido una semanita para pasar las navidades con nosotros y para conocer a Raúl.

A pesar de haber estado casi toda la noche viajando no se les notaba muy cansados y en cuanto han llegado a casa del aeropuerto se han puesto a sacar regalitos de las maletas para todos. En la foto de abajo los podeis ver con Laura, que está viendo un libro para colorear que le han traido. Raúl mientras, por supuesto, dormido en su cunita.

15 de diciembre de 2008

¡1 Mes!

Ya he cumplido mi primer mes en este mundo, y de momento creo que me estoy portando bastante bién.

Me paso la mayoría del tiempo dormido, y cuando me despierto lo hago para tomar el pecho. Como un montón; en total en el día más de 1 litro de leche. Así no es de extrañar que esté creciendo y engordando muchísimo; ya peso prácticamente 5 kilos.

Papá y mamá tampoco se pueden quejar de que no les deje dormir mucho. La mayoría de las noches me suelo despertar sólo una vez, me tomo mi leche y me vuevo a dormir.

Los pocos ratos que estoy despierto he empezado a fijarme un poco en los objetos, e incluso algunos los sigo con la vista un poquito, como los muñecos de colores que están todo el día dando vueltas por encima de mi cunita.

14 de diciembre de 2008

Pasando la aspiradora

Como ahora hay muchas cosas que hacer y papá y mamá casi no tienen tiempo para nada, me he ofrecido a pasar yo la aspiradora.

La verdad es que todavía es muy grande para mí y apenas pude moverme de donde me veis en la foto, pero lo que importa es la intención, ¿no?

9 de diciembre de 2008

¡28 meses!

De nuevo ha pasado un nuevo mes, y esta vez lleno de grandes cambios en mi vida. El primero y más importante es el nacimiento de mi hermanito Raúl, que no sólo me ha cambiado el día a día, sino sobretodo la forma en la que juego. En las últimas semanas le he cambiado el nombre a todos mis muñecos, y ahora la casa está llena de Raúles por todos lados. Por supuesto que a todos hay que darles de comer, cambiarles los pañales, vestirles, y taparles cuando tienen frío.

Mientras también me he vuelto grande: ¡A partir de ahora ya siempre hago la caquita en el váter! Con el pipí todavía tengo algún que otro problema y a veces se me olvida decirlo y se me escapa. En esos casos mamá no da abasto a lavarme toda la ropa. Para dormir todavía me ponen pañal, por si las moscas, pero casi siempre me está completamente seco cuando me lo quitan.

6 de diciembre de 2008

Papá Noel en casa

Hoy estábamos en casa y de repente he visto a Papá Noel por la ventana, así que he ido corriendo a abrir la puerta para que entrara en casa. Ha estado viendo mi habitación y la de Raúl y luego le he puesto una silla para que se sentara. Entonces ha abierto un saco grande que traía y ha estado dando regalitos para todos, incluso para Raúl. A mí me ha traído unos chocolates, un estuche para guardar mis pinturas, y una caja grande de Legos. A Raúl le ha dejado en su cunita (porque estaba durmiendo) un sonajero y un barquito para la bañera.

Luego ha comido unos dulces que le he dado, me he hecho una foto con Él (ver abajo) y se ha ido porque dice que tenía que ver a muchos más niños.

5 de diciembre de 2008

Papá Noel en la oficina

Aquí en Hungría mañana se celebra el día de San Nicolás y es cuando viene Papá Noel y trae regalitos. A papá le han dicho que a lo mejor hoy va a pasarse por su trabajo, así que me ha llevado a su oficina. Había un montón de niños, porque todos los compañeros de papá también llevaron a sus hijos. Y si tenían razón, porque cuando estábamos todos jugando, de repente apareció Papa Noel por la puerta con una campana muy grande y un saco lleno de juguetes.

Luego nos fue llamando uno a uno (yo fui la última) y nos dijo algunas cosas (a mí que había sido buena, pero que no me cogiera tantas rabietas). Después nos dio un regalito. El mío fue un calendario con unos dibujos muy bonitos de un topo.